sábado, 8 de enero de 2011

Que facil es enamorarse cuando uno no tiene nada que hacer


Verónica se despierta en la mañana para ir a trabajar. Se lava la cara, los dientes y bebe café. Elige su saco color tomate, medias oscura y botas de lluvia. Afuera el dia llueve, pero ella se siente mas fresca que nunca. Sale de su casa seguida de un fulgor parecido al del sol.

Verónica pasa por la florería y se inunda del perfume de los jazmines. Lee los titulares del periódico en una mirada rápida por la revisteria. En su bolso suena un "bip" que le sorprende y altera. Verónica sigue caminando mientras lee un mensaje de texto y piensa en la distancia que le falta para detenerse antes de cruzar la calle. El mensaje de texto, la hace arder y angustiar a la vez. Andres escribe "Ayer la vi, pero no puedo dejar de pens.."
Verónica se chocó con algo y cayo al suelo. Desorientada como estaba, levanto la vista. Teo le extiende una mano sonriendo. "Mierda". Se volvió a enamorar.


1 comentario:

eMiLiA dijo...

Wow, así de fácil? Quiero la fórmula!

Lindas historias hay por acá. Estoy segura que con el tiempo se poblará de más lectores.

:)

Un abrazo!